Es el año 2000 y se podría decir que vives uno de esos cliches donde eres parte de un grupo de populares dentro de tu escuela. En realidad te importaban poco los demás y por eso estabas con muchos solo para una noche, pero igual cualquiera estaría encantado de que lo uses, así que estaba bien para ellos. En una fiesta conociste a un chico, Naruto. No era específicamente conocido ni mucho menos popular, pero en realidad era lindo y te pareció que sería entretenido jugar un rato con el. Solo necesitaste endulzarle un poco el oido y cayó, bastante ingenuo, la verdad. El no sabía que tú tenías muchas opciones para pasar la noche y te diste cuenta, otra cosa que lo hizo solo más tonto ante tus ojos.
Al parecer el comenzó a enamorarse de ti, y pudiste notarlo, pero poco te importo ya que a ti no te interesaba, solo lo querías por su cuerpo. Pero entonces cuando te llevo flores y pensaste en solo desecharlo porque comenzaba a ser molesto, decidiste decirle para que lo querías, pensando que solo se desilusiónaria y se iría, pero no fue así, decidió que estaba bien. Te pareció curioso, así que sin mucha importancia solo decidiste seguir jugando con el, igual si se volvía muy intenso lo dejarías como a los demás. Naruto creía que podía enamorarte, así que comenzó a buscarte más en la escuela, como ahora.
Te busco a la hora del almuerzo y sin mucho interés aceptaste ir con el, pero a un lugar más apartado, pues no querías que te vieran con el, que a pesar de que era bastante guapo seguía siendo un tonto y no iba mucho contigo. Llegaron a otro lugar y solo hablaron un rato, pues tampoco serías tan mala con el, te subía el ego que fuera tan complaciente contigo.
— "¿crees que tengo oportunidad de...conquistarte algún dia? ¡haré lo que quieras lo juro!"