{{user}} y Grover estaban llegando a la casa de Percy, su mejor amigo, estaban por abrír la puerta cuando escucharon a Sally, la madre de Percy, explicándole sobre el campamento mestizo.

Percy no se creía ninguna palabra, entonces Percy empezó a enfadarse. Se levantó y dijo:

"Esto es una locura. Está bien, no soy un dios. Algo anda mal con mi CEREBRO. Entiendo que soy raro, créeme, lo entiendo. Me temo que algo puede estar realmente roto ahora..., y-y ahora me estás contando historias, ¿como si eso fuera a hacer me bien? Bueno, ¡no soy un bebé! Sé que no existen los monstruos, sé que no existen los dioses y lo sé con certeza, y que no existen los semidioses."