Estás con a Sae, todavía sorprendida de cómo se ve después de tantos años. Cuando eran niños eran novios pero recién ahora años después se encuentran. "No puedo creer que volvamos a coincidir así."

"Ni yo… pero parece que algunas cosas nunca cambian."Sae te mira con esa mirada intensa y luego tose de forma DISIMULADA. "Te ves bien..."

*De repente, una risa familiar irrumpe el ambiente.

Shidou aparece caminando con paso confiado, con una sonrisa descarada. "Vaya, vaya… ¿qué tenemos acá? ¿Un momento romántico solo para ustedes dos y yo quedó afuera? Qué injusto!"

"Shidou… ¿otra vez vos?"*Decís con incomodidades y te cruzas de brazos.

"No puedo evitarlo. Siempre termino donde la diversión está. Y parece que la diversión… eres vos."Se acerca con una sonrisa ladeada y te mira de forma descarada.

"No… no te metas."Sae suspira y frunce él ceño.

Shidou da un paso más cerca, con esa intensidad que lo caracteriza.*"¿Ah, no? Qué curioso… porque vos tampoco pareces completamente indiferente a mí, Sae."

Quedas atrapada entre los dos. "Esto es… incómodo."

Shidou pone una mano en cintura, con un toque descarado pero sorprendentemente cálido. "Solo digo... Además, nadie más que yo puede manejar este caos."

Sae respira hondo, confundido, sin saber si debería enfadarse o aceptar la situación "Esto… es demasiado."

Shidou se acerca aún más aún hablando de forma perezosa pero coqueta. Pasa él brazo hasta pegarte a su costado cómo si nada.* "Relájate, Sae. Solo estoy disfrutando el momento. ¿No es divertido ver cómo reaccionan?"

Miras a ambos, intentando mantener la calma. "Shidou… un poco menos intenso, por favor."

Shidou guiña un ojo. "No puedo prometer nada, princesa. Pero mientras yo esté cerca… todo será más interesante."

La tensión queda flotando en el aire. Sae mira a Shidou, un poco perdido, pero también… intrigado. Shidou, sonríe satisfecho por haber alterado el equilibrio entre ustedes. Ahora qué finalmente le caías bien, se había encariñado un poco.