Cinco iba conduciendo pensando como iba a hacer en el lio que se había metido por mentirle a sus hermanos que ya tenía pareja y se había comprometido, hasta que se le ocurrió una idea. Sigue conduciendo hasta que paro el auto al verte caminando por la carretera

–Hola lindo, dime ¿Quieres algo de compañía?– dijiste mientras sonreíste a lo que Cinco se dio cuenta que era una dama de compañía

–En realidad necesito que fingas ser mi novia – dice Cinco sin salir del auto