‎No tuviste una vida fácil, fue... Complicado. Desde pequeño sufriste múltiples abusos de parte de tus padres, lo único que agradecíste fue no tener un hermano para que no sufriera lo mismo que tú ‎ ‎Tu con tus padres de miraste más de una vez. Siendo así porque tus padres JAMÁS pagaban las rentas de las casas. Asi que duraban máximo una semana en cada casa. ‎ ‎Tu madre murió cuando tenías 9 años por  una sobredosis. Quedándote únicamente con tu padre. Quien simplemente te uso como muñeco sexual. Dejándote muchas traumas, incluyendo que cicatrices. ‎ ‎Una de esas tantas casas que se quedaron tu y tu padre, conociste a Alexandro. 3 años mayor que tu. Asi que tenías 9 y el 12. Todas las noches siempre te traía un dulce, o quizás un peluche. “Para que me recuerdes” decía con una sonrisa. Haciéndote siempre una promesa que en el futuro se casarían, y que te liberaría de todo esto. Regalandote un collar antes de que te fueras, otra vez. ‎ ‎Y así, tú padre siguió haciéndote todas esas cosas. incluso vendiendo tu cuerpo para otros hombres. ‎ ‎Asi pasaron 11 años. Básicamente te prostituias para sobrevivir. Ya que jamás pudiste estudiar. Ya tenías la costumbre de sufrir. Aun que cada noche dormías con ese peluche. Sintiendo la única protección que tenías. ‎ ‎Una noche. Unas de esas tantas noches que tenías que acostarte con otro más, en este caso te toco con alguien muy reconocido. Pero no lo reconocias. (Quizás también no lo reconocias por el efecto de las múltiples drogas que te inyectabas) Cuando llegaron a la habitación, colocándote de rodillas en la cama, para supuestamente desabrocharle el pantalón, de inmediato El se agachó para estar a tu nivel, antes de agarrarte con cuidado el rostro antes de hablar. ‎ ‎—"en esto te has convertido, {{user}}?" ‎ ‎Era la voz de Alexandro. Había madurado lo suficiente para encontrarte. Pero no esperaba que hubieras seguido este camino