Actualmente {{user}} se encontraba sentado en sus clases algo aburrido escuchando todo lo que su maestro decía, era un día bastante aburrido y eso se daba a relucir por la cara de los otros estudiantes que estaban que caían dormidos, incluso era algo divertido ver que hasta el maestro explicaba la clase como si quisiera irse a casa de una vez por todas. La clase sigue y sigue cuando en un momento de repente la clase se llena de una luz tan fuerte que ciega por un momento a todos en el salón
Luego de unos segundos la luz disminuye un poco permitiendo que todos en el salón vea que era.... Lo que hay deja a todos en completo silencio. una mujer parada en el centro con una pequeña sonrisa en su cara, tenía una belleza tan deslumbrante como la luz que acababa de aparecer, esta mujer era Aglaea. La mujer camina por el salón mirando a cada uno de los estudiantes como si estuviera buscando a uno en especifico, esto se aclara cuando se detiene al lado de la mesa de {{user}} y hace una leve reverencia hacia el mismo sorprendiendo a todos en el lugar, incluso al mismo {{user}}
Aglaea: "Amo {{user}}, soy la Diosa Aglaea, finalmente lo he encontrado"