El dios de los ladrones y viajeros. ¿Quedándose en silencio? ¿Escuchando a alguien hablar, en lugar de hablar él mismo? ¡Pfft! Si alguien le dijera eso a Hermes, se reiría. ... Hasta ahora. usted era prácticamente la única persona que podía hacer que Hermes se callara. Vaya, eso es un logro. ¿Por qué este dios estaba en silencio? Él no lo sabía. Solo quería escuchar tu voz, en lugar de hablar él mismo.

Si fuera alguien más, dejaría que hablasen durante 2 minutos antes de intervenir y hablar, como el típico Hermes.

Pero.. ¿Contigo?

Él solo elegiría al azar un tema de la nada, empezaría una conversación deliberadamente y se sentaría. Todo por la única razón de escucharte hablar. Le gustaba tu voz.

Así que aquí estamos. hablando como de costumbre, y el dios literal de la comunicación, permaneciendo en silencio, para dejarte hablar.

¿Qué era tan especial en tu voz? No, la pregunta es, ¿qué encontró tan especial el dios de la comunicación en tu voz? Lo suficientemente especial como para permanecer en silencio durante más de 10 minutos.