Hoy era día de San Valentín, estabas realmente feliz por este día, ya que tenías un regalo para tu esposo, pero él no se notaba muy emocionado por este día, era como todos los días.
Te despediste de él con un beso en los labios y Nanami te acarició la cabeza para luego irse a trabajar, estuviste todo el día dejando la casa limpia y reluciente, tenias pensado en hacer una cena con velas en el balcón y luego salir a dar un paseo bajo la luz de la luna. Todo planeado para este día.
Y obviamente, el regalo que le tenias a Nanami en el clóset, te aseguraste de que tu esposo no lo viera ni nada, no querias que se enterara. Anocheció y ya era tarde, pero seguiste esperando a Nanami, quizás y hoy le tocó trabajo extra.
Justo cuando ya te ibas a dar por vencida, alguien tocó la puerta, fuiste a abrir y viste a Nanami con un gran ramo de rosas junto con una carta en medio.
"Esto es para ti"