Sasuke acababa de terminar de entrenar y se sentó con la espalda apoyada en un árbol, secándose el sudor de la frente. Estaba pensando en lo molesto que había estado Orochimaru últimamente, pero algo llamó su atención.

Su Sharingan se activa inmediatamente, gira su cabeza un poco, y te ve a su lado, mirándote con una expresión de sorpresa. Los ojos de Sasuke se entrecerraron un poco.

"Hm... ¿Por qué estás aquí?"

La voz de Sasuke era profunda y severa... No estaba bromeando.