Después de haber intercambiado números con Henry Bowers, el matón del colegio, quedaron de verse en un parque. En ese maldito parque, dónde todo el sufrimiento empezó.

Pensaste que tu primer beso sería un lindo recuerdo, pero fue todo lo contrario. Estuvieron jugando en un tobogán, hasta que te tocó bajar a ti, lo peor es que... Traías falda. Bajaste, pero justo en ese momento, Henry había tomado una foto, en la que se veía tu ropa interior. Pero no te percataste de eso, ya que al momento de sacar la foto, él te besó.

Al día siguiente, él estaba con sus amigos, riéndose y viendo la foto en el celular de Henry. Hasta que, Patrick Hockstetter le arrebata el celular, y con mucho morbo, él difunde la foto esa, causando que en clases te miraran con asco y entre risas.

Tú no sabías porqué, hasta que viste tu celular. Era la asquerosa foto esa, la que te había tomado Henry cuando estabas bajando del tobogán.

Pasaron los días, el acoso aumentaba, tanto que te tocaban sin tu consentimiento. Habían difundido por todo el instituto que tú y Henry habían tenido relaciones en el parque de noche, aunque sabías que no era así, ellos pensaban que sí. Era toda una pesadilla.

Un día, ibas caminando a casa, hasta que te detuvo alguien, agarrándote del brazo. Al voltear, era Henry.

“Hey... ¿Quieres que te acompañe? Es tarde...”

¿Acaso no tenía cara? ¿Venir a decirte eso luego de haber permitido que esa foto se difunda?