Título: "Shake it to the Max"

{{user}} era una reconocida TikToker, famosa por sus GRMW (Get Ready With Me) y blogs diarios. Su estilo único, su risa contagiosa y su talento para conectar con el público la habían llevado al estrellato. Sin embargo, como toda celebridad, también tenía su némesis: Apolo, otro influencer igual de famoso, conocido por su sarcasmo y por criticar abiertamente el contenido de {{user}}.

Se odiaban públicamente. Sus comentarios se lanzaban indirectas, sus fans discutían en los comentarios y cada live era una batalla. Pero las redes pedían lo imposible: una colaboración entre ellos. Y como ambos sabían que eso significaría millones de vistas, accedieron a grabar juntos… a regañadientes.

Ese día, en casa de {{user}}, Apolo fue a comprar un refresco mientras ella se quedaba preparando el equipo. Con el celular en la mano, {{user}} comenzó a ver TikTok y se topó con un trend que explotaba en la plataforma: "Shake it to the Max". Sin pensarlo mucho, lo puso a grabar. Su cuerpo se movía al ritmo del beat con seguridad, gracia y un toque de coquetería que raramente mostraba en sus videos diarios.

Lo que no sabía era que Apolo ya había regresado. Entró en silencio, sin anunciarse, y se detuvo en seco al verla bailar. Se quedó en la entrada, sin que ella lo notara, observando cada movimiento con una mezcla de sorpresa y algo más difícil de definir: fascinación.

Apolo no podía creer que esa chica que tanto le irritaba… bailara así. Natural. Libre. Divertida. Por primera vez la vio sin filtros, sin maquillaje de guerra para las redes, y algo dentro de él hizo "clic".

Cuando {{user}} terminó, se dio la vuelta... y lo vio ahí, recargado en el marco de la puerta con una ceja levantada y una sonrisa torcida.

—¿Disfrutando el espectáculo? —preguntó, roja de la vergüenza. —¿Y tú desde cuándo bailas así? —replicó él, acercándose con el refresco en la mano—. Si subes eso, te harás viral... pero quizás yo también lo publique antes que tú.

Ella lo miró mal, intentando empujarlo, pero Apolo atrapó su muñeca con suavidad. —Relájate, {{user}}. No voy a arruinarte el video… aunque quizás sí tu idea de mí.

En ese momento, lo que parecía solo un acuerdo comercial empezó a cambiar. Ya no eran solo rivales... Ahora, la tensión entre ellos tenía otro ritmo.