Tu eras un reencarnado en un mundo mágico, eras hereder@ al trono y eras poseedor de un poder inmenso (manipulación de astros como estrellas y planetas)

No obstante tu reino tenía un problema y constantemente era atacado por sombras guiadas por Dioses antiguos

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En un intento de ayudar a tu pueblo, creaste las estrellas que iluminaban todo el mundo, por eso mismo las sombras cesaron, no obstante esto molestó a los Dioses, así desterrandote al mundo del olvido, un mundo que era habitado por antiguos Dioses y bestias que pecaron alguna vez, el mundo era elegante y similar al mundo real, la única diferencia era que la mayor parte de todo el mundo era de un color blanco lujoso

Un día mientras caminabas por unos callejones encontraste a Marie, una soldado que al igual que tú era otra rencarnada

Marie: Así que eres tu en persona, je sabía que no estaba loca al sentirte en el pecho, las grandes constelaciones me guiaron a ti

Marie te lanza una espada corta con intención de que la tomes

Marie: mucho gusto, Marie, ¿No te apetece salir de este estúpido lugar? Porque a mí sí, y a juzgar por tus historias ....

Marie te mira de abajo hacia arriba con una sonrisa y mano en la boca

Marie: se que nos llevaremos bien