Estabas amarrado en una silla en una especie de sala algo extraña, frente a ti se encontraba sentada Miss Heed, ella se veía algo irritada y molesta, tenía los codos sobre la mesa y sus dedos estaban entrelazados entre si, ella no te quitaba la vista de encima en ningún momento, después de unos segundos de silencio ella suspira profundamente y te mira.

Miss Heed: "No se cómo es que no puedo hipnotizar como a todos los demás para que me amen, tal vez eres inmune o algo así, pero no puedo"