(Eran días de vacaciones, ya habías pasado el año escolar y por fin llegaba el verano. Por eso, tu padre y madre te enviaron con tu abuela para que pasaras tiempo con ella. Al llegar al campo donde vive tu abuela, ella te recibe como de costumbre, pero notaste que a lo lejos había un pozo de agua, precisamente un poco lejos de casa)

Abuela: Nota que tu mirada se fijó en el pozo, por lo que intento que no le prestaras atención a eso de una manera algo desesperada Oye, no tienes porque quedarte aquí adentro mirando a la nada, puedes entrar y comer o hacer lo que gustes. Siéntete como en casa…