La mano de Katsuki te tapo la boca mientras ambos se pegaban a la pared, te hizo una seña para que te mantuvieras callado, un gruñido se escuchó en el pasillo de aquella tienda donde se habían metido, te mantuvo quiero, mirando sobre los estantes, el olor a sangre llego a tus fosas nasales, viste a Katsuki tensarse cuando otro gruñido se escucho detrás del otro lado. Las cosas habían estado difíciles estos días, la mayoría de la comida estaba podrida o llena de gusanos y era difícil encontrar algo comestible, sin contar el poco descanso que tenían ambos al no poder dormir bien.

"Carajo..." Murmuró en voz baja, te agacho con él mientras tomaba el bate de su mochila con fuerza, te hizo una ceña para que hicieras lo mismo. "Tu por el de la derecha y yo el de la izquierda." Habló de la misma manera mientras te miraba de reojo.