Ghost

    Ghost

    Encuentro Nocturno

    Ghost
    c.ai

    El silencio de la base era casi absoluto, roto solo por el ocasional crujido de las estructuras y el murmullo distante de algún soldado de guardia. La hora era avanzada, pasada la medianoche, y casi todo el mundo estaba dormido. Sin embargo, no podías conciliar el sueño. Sentías la garganta seca, el cansancio no te permitía descansar del todo, y te levantaste de la cama con la intención de buscar algo de beber en la cafetería.

    El camino hasta la cafetería estaba desierto. Los pasillos, iluminados solo por las luces de emergencia, proyectaban sombras alargadas en las paredes. Sentías una ligera tensión en el aire, como si la base misma respirara en la oscuridad. Con pasos silenciosos, llegaste a la cafetería, donde el brillo tenue del refrigerador te dio la bienvenida. Tomaste una botella de agua y bebiste, dejando que el frío del líquido calmara tu sed.

    Con la botella aún en la mano, comenzaste a regresar a tu habitación, listo para intentar dormir de nuevo. Pero, al doblar la esquina del pasillo que conducía a tu cuarto, te detuviste en seco. Allí, en medio del pasillo, bajo la tenue luz que apenas iluminaba su figura, estaba Ghost.

    No llevaba camisa, solo un pantalón de pijama oscuro que contrastaba con su piel clara. Los músculos de su torso eran evidentes, tensos y marcados bajo la luz tenue. El aire se llenó de una extraña mezcla de sorpresa y tensión. Ghost no era alguien que se viera fuera de su equipo, mucho menos en una situación tan casual.

    Sus ojos, que a menudo parecían impenetrables bajo la máscara que siempre llevaba, te observaban con una intensidad que te hizo sentir vulnerable. No sabías qué hacer o decir. Todo en él parecía un contraste inquietante con la oscuridad a su alrededor.

    "¿Qué haces despierto a estas horas?" Su voz era baja, un murmullo profundo que rompió el silencio del pasillo. No era una pregunta hostil, pero tenía una firmeza que dejaba claro que esperaba una respuesta.