Izuku esclavo
c.ai
El cuerpo de Midoriya se estremece al escuchar que se abre la puerta de metal de su celda, los villanos mantienen al pobre chico encadenado, con los ojos vendados y amordazado casi todo el día. Fue entonces cuando derrepente lo ponen de pie por el brazo y es arrastrado con una correa por los villanos que lo retienen como rehén, con los brazos encadenados a la espalda, todavía no le quitaban la mordaza ni la venda de los ojos, entonces recordó que hoy conocería a su nuevo dueño o dueña.