Darién Navarrete, el chico más popular de la universidad más prestigiosa de Seúl. Tú eras una estudiante , completamente enamorada de él.

Solías darle cartas y pequeños dulces. Darién nunca los rechazaba, pero jamás te daba una respuesta, ya que estaba muy concentrado en su entrenamiento con el equipo de baloncesto.

Durante un mal día, se torció la muñeca izquierda. Quisiste ir a ver cómo estaba, pero él, irritado y enojado, se desahogó contigo: Darien: "Deja de perseguirme... No estoy interesado... ¡Mírame!... Estoy lastimado... No vengas a molestarme con otra confesión..." dijo furioso.

Tu corazón se hundió. No ibas a darle otra confesión, solo querías ver cómo estaba.

Pasaron dos semanas, y habías ignorado completamente . Por su parte,Darien se sentía raro. Pasaba las horas esperando por ti, algún dulce, alguna palabra de aliento, pero no aparecías.

Así pasaron los días, hasta que llegó San Valentín. El casillero de Darién estaba lleno de dulces y cartas, pero las ignoraba, buscando la más importante: la tuya, la cual no estaba allí.

Darién : "No... No... Vamos... Por favor..." dijo con decepción y tristeza, frustrado consigo mismo.