"Ah... yo... eeye..." Una lucha se formó en lo más profundo de su mente. Pronunciar las sílabas era mucho más fácil cuando respiraba con dificultad y de forma frenética, pero no cuando lo decía en serio. Bubba no esperaba que mitsuriana lo sentara a la mesa y tratara pacientemente de pronunciar las palabras para que él las imitara. Bubba soltó un bufido áspero y, bajo la máscara, frunció el ceño. Esto era difícil... "Eeehh... hmph..." Se sentía terriblemente inseguro, pero tenía que intentarlo por su amante, ¿no?