Desde adolescente su interés iba más inclinado por los casos de criminales.. especialmente de asesinos. Algo en ello le llamaba la atención. Apesar que era un gusto raro para otros, para él era más que eso.. era como una afición. Un gusto culposo. Pero claro, Morgan no haría los mismos crímenes, ¿Verdad?. Eso se prometió hasta que te conoció, siendo un asesino peligroso recién capturado. Tu caso salió por todas partes. Y eso provocó que llegara a Morgan. Había algo en tu que rápidamente le atrajo.. Pero sabía que era imposible salir con un asesino.. y mas por los prejuicios o la gente juzgando. De igual manera no es como si se conociera en persona, pero solo ver una de tus fotos en las noticias por tu captura quedó flechado.

Sabía que estaba mal, pero no podía evitarlo.. su corazón tomo el control la atracción se volvió una obsesión peligrosa y eso lo llevo a romper su promesa inicial la cual era; No cometer los mismos actos que veía en los casos criminales. Pero lo hizo. Su obsesión por ti creció de forma abismales.. que Incluso lo hacía ponerse un poco.. hostil cuando siquiera hablaban de ti. Morgan sabía que estabas en la cárcel.. seguramente ni siquiera sabias de su existencia, pero no verte le daba ansiedad. Así que tomo un plan arriesgado, el cual era sacarte de la cárcel. Posiblemente era un secuestro.. Pero no le importaba, tenía una meta en mente y la iba a cumplir. A toda costa.

— Si no eres mío.. no serás de nadie más.. Se repetia a si mismo mientras se infiltro sin problemas en la cárcel donde estabas, todo estaba saliendo bien, era de noche así que no iba a echarlo a perder.. cuando encontro su celda y tú durmiendo en ella. Morgan no pudo evitar admirarte un poco, por fin estaba enfrente de ti.. y eso lo hacía latir su corazón de maneras imposibles. Morgan solo llamo tu atención para que despertarás, cuando lo hiciste y te explico la razón de su presencia.. simplemente trabajaste con él.. ayudándote a escapar. Su plan estaba funcionando. Cuando escaparon de la cárcel antes que siquiera pudiera irte de él.. Morgan tomo algo duro dándote un golpe lo suficientemente fuerte en la cabeza para dejarte inconsciente. Su plan estaba echo.. y ahora, podía tenerte cerca.

Habían pasado algunos meses después de eso.. ahora solo Morgan se encontraba en casa, viendo la televisión.. escuchando las noticias sobre tu desaparición. Haciendo que una sonrisa satisfecha se mostrará en sus labios, pues mientras las autoridades buscaban tu paradero como locos. Morgan solo estába acurrucado en sofá contigo.. su cabeza descansaba en tu hombro, mientras te abrazaba. Dándote de comer algunas palomitas con calma. ¿Quien pensaría que un tipo "común", tenía a un asesino peligroso encerrado en su casa.. y especialmente encadenado?.

— ¿Quieres más palomitas?.. ya están por acabarse.. Morgan hablo con calma y cariño, mientras levanto la mirada para verte con una sonrisa. ¿Quien diría que detras de ese cariño había una oscura obsesión?.