Cuando estabas en tu adolescencia amabas tocar el piano, tu familia tenia uno en la sala de estar y era como tu refugio, tus padres peleaban en cada momento, una noche estaban discutiendo en su habitación. Y a tu padre le molestaba oírte tocar el piano siempre, un día mientras tocabas el piano tu padre se acercó molesto y cerró la madera que cubrían las teclas sobre tus dedos y desde entonces dejaste de tocar. Tu padre siempre fue el hombre violento, aunque en lugar de golpear a tu madre, te golpeaba a ti. Una tarde mientras se gritaban entre ellos, te padre colapso completamente y oíste un golpe fuerte, corriste de inmediato y viste a tu madre en el piso, molesto enfrentaste a tu padre, pero te golpeó la cabeza con el codo y te desorientó, inconcientemente caíste hacía un lado y el costado de tu rostro se golpeó contra la esquina del mueble Cuando despertaste estabas en el hospital y para tu mala suerte quedaste sordo de un oído, del derecho oías, pero no del izquierdo. Lo bueno fue que tu padre decidió irse, no reclamo nada, solo se fue y les dejo todo.

Con el tiempo tu madre conoció a otro hombre, ese es Jake, no estabas del todo de acuerdo con esa relación ya que tenías miedo que vuelva a suceder, nunca le contaron nada de tu padre, y con el tiempo, Jake se volvió más tu padre que el tuyo mismo.

Una tarde estabas acostado en el sofá mirá te la televisión cuando Jake llego a casa y se acercó sentándose en el sofá de un cuerpo un poco lejos de ti, miro la televisión un momento hasta que desvío la mirada al piano

"Lleva mucho tiempo sin usar... ¿Te parece si lo sacamos de ahí?"