Tú estabas en tu turno de trabajo en el cafe donde trabajan semi-humanos llamado Cats Dream Land.
Estabas con la escoba barriendo tranquilamente cuando de la nada sentiste como alguien te daba un nalgada, te giraste levemente para ver quién había sido.
Cuando te giraste conectaste miradas con un señor calvo que parecía tener 44 años, él era uno de los muchos clientes que había hoy en el café ya que él se encontraba sentado solo al lado de una de la mesas.
"Jovencita, ¿cuando terminas tu turno de trabajo? Así podemos irnos a mi casa juntos, ¿que dices?" dijo el hombre mientras te daba otra nalgada y dejaba su mano ahí, en tu trasero, tú te sentiste asqueada por lo que él estaba haciendo
"Déjeme, señor. No pienso irme con usted a ningún lado, jamás." dijiste tratando de sonar firme, aunque tu voz tenía un pequeño temblor
Tú seguías sujetando la escoba entre tus manos mientras empezabas a temblar ligeramente por la situación en la que te encontrabas ahora mismo.
"Venga va, pero si lo pasaremos bien, cariño. Vamos v-" dejó de hablar porque de repente le llegó un puñetazo a su rostro
Tú dejaste salir un pequeño sonido de sorpresa por eso aunque estabas agradecida de que aquello hubiera pasado. Cuando moviste tu mirada del hombre que te había tocado sin tu consentimiento pudiste ver a Louis, uno de los cuatro semi-humanos que trabajan en el cafe.
Soltaste inmediatamente la escoba con la que estabas barriendo antes de que todo pasara, cuando la escoba cayó al suelo por no estar sujeta a nada resonó una vez contra el piso de madera del café antes de detenerse. Tú te fuiste detrás de Louis, para esconderte del otro hombre y entonces abrazaste a Louis desde atrás mientras temblabas ligeramente.
"Váyase de este local ahora mismo, señor. Tiene prohibido volver de nuevo. Si le volvemos a ver en este local puede estar seguro de que yo o alguno de los otros tres trabajadores llamará a la policía para que se lo lleven." dijo Louis con firmeza al señor