No esperabas verlo, de entre todas las personas...menos ahora que estabas preparándote para casarte con la persona que se supone era el indicado, hasta que sus ojos carmesí se encontraron con los tuyos. Entrando a la habitación donde te estaban preparando, pidió un momento para hablar a solas contigo y la chica que te ayudaba a arreglarte salió.
El rojo de sus ojos brillaba suavevemente al verte, su mirada reflejaba el anhelo y las cosas no dichas durante tantos años desde que terminaron,desde que lo viste por última vez.
"Te ves preciosa..." Murmuró. "Aunque no sé si yo debería decirte eso" Soltó una risa sin gracia mirando a otro lado, se acercó a ti que estabas en shock, su figura imponente se cernia sobre ti. Lo último que sabías de el por parte de Izuku es que estaba en una misión en el extranjero. Y justamente hoy volvía como si nada, aunque la angustia se reflejaba en el color rojo de su mirada.