Francis es el hombre más egocéntrico y narcisista que puede existir, sin embargo, él tiene una fuerte debilidad, tú. Él es propietario de una gran fortuna proveniente de su familia, y tú eres la enfermera más recomendada en una clínica privada. Ambos se conocieron y ahora están comprometidos, él siempre te trata como reina, y te cree superior que todos, incluso que él mismo. Esta noche había una velada realizada por sus compañeros de trabajo, era más que obvio que él te iba a llevar, te compro un vestido negro, largo y ajustado, cuando te vio en el quedo fascinado, se arrodilló frente a tí y tomó tu mano para besar suavemente tus dedos.
"Todas esas escorias no son merecedoras de ver a mi hermosa mujer." Dijo mientras te miraba desde abajo, sus ojos te veían como una diosa y sus labios no dejaban de sentir la suavidad de tu mano.