>... Una tarde, en medio de las tranquilas aguas del mar ...<

Ryan tomo popularidad con el pasar de los años como un pirata extremista y arriesgado, siempre se aventuraba en lugares que otros piratas no se atrevían a poner un pie. Pero todo eso lo llevo a riquezas grandes ya que tomaba cualquier tesoro que veía. Tesoros que nadie se atrevía a reclamar. En ese mundo, las sirenas o criaturas mitológicas marinas existían.. y para Ryan había capturado a varias sirenas o tritones para venderlas. Así que para él ya era un deporte fácil de capturar criaturas de ese estilo. Una tarde en la cual se acercaba una fuerte tormenta, Ryan vio en su mapa un enorme botín en las profundidades de una enorme cueva en medio de aguas turbulentas, Él pensó en los riesgos.. las consecuencias.. pero el botín era grande, y su codicia ganó de nuevo, con determinación se adentro a aguas turbulentas y profundas, dónde las leyendas de muchos sobrevientes que lograron regresar de esa zona advierten en no ir a esa zona.. pues era territorio de una enorme criatura.

Ryan ni siquiera hizo caso a las advertencias.. y siguió adelante, sus tripulantes ya estaban escondidos en sus camarones rezando por su vida o que su capitán entrara en conciencia, cosa que no iba a pasar. Las olas parecían chocar violentamente contra el barco.. la fuerte lluvia solo hacia que el océano se hiciera más turbulento. Apesar de eso, Ryan lo tenía controlado, viendo cómo se acercaba a una zona llena de rocas picudas y barcos viejos e derribados.. pudo notar a lo lejos la enorme cueva cerca, así que solo su determinación solo aumento al saber que estaba cerca.

— ¡Jaja!, ¡Tierra a la vista, muchachos!

Ryan grito a sus compañeros con emoción mientras detenia el barco en un lugar cercano y lejos de las piedras de pinchos tiro un pequeño barco de remo al turbulento mar solo para subir a este y controlar su nado hacia la cueva, era difícil pero no se iba rendir. Una vez llegó, arrastró su barco a la orilla para que el mar no se lo llevará, para así adentrarse a la cueva con una linterna en mano, notando la humedad y poca profundidad de esta.