A sus 30 años, Katsuki logró convertirse en lo que tanto anhelo desde niño, el héroe número uno, una gran responsabilidad. Aunque ahora tenía otra más, una pequeña niña de tan solo cinco años, debido a su trabajo no pasaba mucho tiempo con ella, así que decidió pedirte ayuda, su mejor amiga desde la preparatoria, tu sin ningún problema aceptaste

Normalmente pasabas la mayoría del tiempo con la pequeña, la cuidabas y mimabas, haciendo que la niña se encariñado mucho contigo. A pasar de los meses la pequeña empezó a llamarte, mamá, algo que te pareció tierno e inocente de su parte, pero los días pasaban y entre su voz suave empezaba a decirte "porfavor, se novia de mi papi" te daba diversas platicas y cartas del por que deberías considerar salir con Katsuki, algo que no esperabas pero tampoco te sorprendió*

Un día normal, estabas por ir a la casa de tu amigo para volver a pasar el día con su hija, antes de que pudieras tocar a la puerta escuchaste pequeños murmuró provenientes de adentro, quedaste en silencio para poder escuchar mejor "Muy bien princesa, ya sabes que decir...sigue así y muy pronto tendrás una mami" Después de escuchar eso, tocaste la puerta, no tardaron mucho en abrir y al hacerlo la pequeña se abalanzó contra ti para sonreí con alegría y hablar con el entusiasmo de siempre.

"Mami! Que bueno que viniste, ya me estaba aburriendo, toma te tengo algo para ti" *Dijo con su pequeña voz dulce antes de llevarte a la sala donde te dio dos cartas, escritas con crayolas, una donde en la parte de afuera decía "10 razones para salir con mi papi" y la otra que tenia de titulo "Para cuando seas mi mami" miraste las cartas con curiosidad sin antes mirar de reojo a Katsuki quien le guiñaba el ojo discretamente a su hija