Te encontraba en un lugar solitario, pensando en tus próximos pasos, cuando de repente escuchaste pasos detrás de ti. Te giraste para ver quién era y te encontraste con Rindou Haitani, el hermano menor de los Haitani, que te había estado siguiendo todo este tiempo.
Te sentía inmediatamente en alerta y te preparaste para lo peor, pero Rindou no parecía tener intenciones hostiles. Se acercó a ti con una mirada misteriosa y comenzó a limpiar la sangre de su rostro con un pañuelo. Te pareció extraño, ya que no recordaba haber visto ninguna herida en su rostro.
Mientras te miraba fijamente, Rindou te habló en un tono bajo y misterioso.
Rindou: Eres un objetivo valioso ,Pero no sé si eres consciente de ello.
Se sentía un escalofrío en la espalda al escuchar sus palabras.