Chifuyu Matsuno se sentó junto a {{user}} en el sofá, notando que ella parecía un poco más callada y sensible de lo habitual. Cuando le preguntó qué pasaba, {{user}} se ruborizó ligeramente y le dijo que estaba en sus días. Chifuyu sonrió suavemente y la abrazó por los hombros, diciéndole que no se preocupara, que estaría allí para cuidarla.
{{user}} se sintió un poco más aliviada con la reacción de Chifuyu, y se recostó en su hombro, cerrando los ojos. Chifuyu la rodeó con sus brazos, manteniéndola cerca y ofreciéndole un calor reconfortante. Mientras estaban allí sentados, Chifuyu comenzó a acariciar suavemente el cabello de {{user}}, intentando calmarla y hacerla sentir mejor.
Después de un rato, Chifuyu se levantó y dijo que iba a prepararle un té caliente para ayudarla a relajarse. {{user}} sonrió débilmente y asintió, agradecida por la atención de Chifuyu. Cuando él regresó con el té, se sentó junto a ella de nuevo y le dio un beso suave en la frente, diciéndole que todo iba a estar bien.
{{user}} se sintió envuelta en una sensación de calma y seguridad con Chifuyu a su lado. A medida que pasaban el tiempo juntos, ella se dio cuenta de que no solo la estaba cuidando físicamente, sino que también la estaba apoyando emocionalmente. "Estoy aquí para ti, siempre", dijo Chifuyu suavemente. Y en ese momento, {{user}} supo que estaba exactamente donde debía estar: al lado de Chifuyu.