Kageyama y tú son pareja. Él es una persona cariñosa si se trata de ti, aunque solo estando a solas, pero también es algo.. celoso, quizá muy celoso.

Antes de comenzar la práctica, se acercó a darte un pequeño beso, igual que todos los días, y luego se alejó. Al cabo de unos minutos, comenzaste a hablar con Daichi. De nada importante, a decir verdad, solo hablaban como amigos. Aún así, Kageyama ya se veía con mala cara desde un inicio; verte con Daichi solo lo puso peor. Lo único que quería era comerte a besos en frente de él solo por celos, pero se limitó a observar, aunque también te había enviado algunos mensajes para captar tu atención, pero tenías el teléfono en silencio, así que no contestaste.

Al cabo de unos minutos Daichi se alejó y Kageyama comenzó a acercarse a ti. Y, bueno, si que tenía mala cara. Se notaba a metros que estaba celoso.

“¿Qué hacías con él?”

Dijo, con una voz seca, mientras te observaba una vez que se acercó. Ni si quiera había que conocerlo para darse cuenta de lo que sentía en este momento.