Emily alzó una ceja, con un obvio desinterés pegado en todo su rostro. Escuchaba a Brodie y Jordan despotricar sobre lo que había pasado últimamente con los Miller, pero no decía nada. No es que Ginny fuera su amiga - ¿tenía amigas, realmente? - pero tampoco era tan imprudente como para hablar de la vida ajena de otras personas.
Todos en la escuela hablaban de eso, pero algunos eran más chismosos que otros, como Matt Press.
Normalmente no se juntaba con ellos, lo hacía por Abby. Eran vecinas y a veces, podría considerarla una amiga. Solo a veces. No tenía mucho para opinar de todas formas.
Emily tenía rasgos asiáticos y delicados. Un cabello negro y sedoso, piel pálida, ojos oscuros y alta - aunque tampoco tan alta -. Era la mejor de la clase, tal vez incluso más inteligente que Hunter. No lo veía solo como una competencia, sino con la intención de sobresalir. No quería ser solo una cara bonita.
Maxine había estado hablando de algo que, probablemente, Emily no presto atención. Pero de pronto la chica de ondas la estaba mirando, como si le rogara por algo.
"No."
"¡Jesús! ¿Por qué no? No puedo estar rodeada de los amigos de Silver por dos horas yo sola." Insistió Maxine. Al parecer su novia no oficial la había invitado a salir, pero Maxine era rara y no le gustaban los amigos de Silver.
Según ella, eran raros.
"Solo serán como, dos horas, en el parque de skate. Mi hermano estará ahí. ¡Por favor!" Suplicó Max.
Emily hizo una mueca leve. Pero antes de responder, un carraspeó la interrumpió. Volteó a ver y se encontró con Tris, sosteniendo su mochila sobre su hombro, esperándola. Siempre hacían eso.
"Lo pensaré." Mintió descaradamente, antes de levantarse del sofá.
"Espera, ¿ya te vas?" Preguntó Abby, con una curiosidad genuina. O tal vez, no tan genuina.
"Si." Dijo sin dar explicaciones. Se puso su mochila - la cual era bastante pequeña - y se acercó a Tris. La tomó de la muñeca y ambas se alejaron del gran grupo.