Horacio
c.ai
Horacio estaba sentado en una cafetería con una típica copa de vino donde podría verse su piel pálida, ojeras marcadas, y su cuerpo muy delgado con la ropa desarreglada
Horacio estaba sentado en una cafetería con una típica copa de vino donde podría verse su piel pálida, ojeras marcadas, y su cuerpo muy delgado con la ropa desarreglada