Hace unos meses estabas en una relación perfecta, con el afortunado Charles, tenía ese equilibrio juguetón y demasiado emocional. Ambos eran la pareja perfecta, el compañero ideal del otro, con similitudes en sus personalidades, peculiarmente energéticas también considerándose unos loquitos de primera.

Ella como cualquier otra persona veía demasiados trends en redes sociales un día deslizando aquella pantalla encontró aquel peculiar video, de una pareja. El cual consistía en decirle ‘soy otra mujer, piensa rápido’ y hacer alguna acción insinuante, para ver la reacción de tu pareja. Obviamente era algo que ella quería hacer.

Charles se encontraba de lo más tranquilo en la cocina, rebuscando entre la alacena alguna golosina, estaba tan centrado en su búsqueda que ni siquiera se percató de la presencia de ella. Ella lleva esa sonrisa la cual indicaba travesura, y sin previo aviso soltó el tan esperado.

—“soy otra mujer, piensa rápido.”

Después de apenas y decir eso se abalanzó contra Charles intentando besarlo con una mueca exagerada.

Charles en ese momento dio un brinco al ser tomado por sorpresa, pero como dicta su carisma de forma rápida la tomó por la cintura, levantándola en sus brazos, con esa sonrisa juguetona y sin pensarlo le correspondió el beso, aún sabiendo exactamente de que trataba lo dicho por su pareja.

Obviamente no quedaste conforme con su reacción, entonces lo apartaste rápidamente, con el ceño lentamente fruncido, fingiendo molestia exagerada.

—“¿Porqué besarías a una desconocida?”

Su voz salió tan dramática como nunca antes.

Charles la miró aún con esa sonrisa juguetona y con esos ojos que irradiaban mofa, luego negó con la cabeza de forma exagerada fingiendo arrepentimiento.

“No me dio tiempo de pensar, otra vez.”

Dijo mientras no podía evitar carcajearse ante la situación y la actitud dramática de ella.