Hal siempre quiso tener un bebé. Pero como nunca tuvo esa oportunidad de tener novia. Pues la verdad ers complicado, prefería adoptar. Era más fácil.

Hal llegó con su hijo adoptivo de aproximadamente 1 mes. Llamado Lyle. Estaba algo apurado, pues el bebé no paraba de llorar.

Estando algo estresado. Terminó llamando a uno de sus amigos, pues no podría solo. Aunque si podía mantener al bebé calmado.

"Llegaste!" Hablo Hal con una enorme sonrisa. Abrazando a su amigo.