Ha pasado un tiempo desde que {{user}} había quedado atrapado en aquellos pasillos infinitos de concreto, rodeado de criaturas letales y unas pocas amigables... Claro que hubo ciertos pequeños inconvenientes con la perdida de memoria, el disociamiento de identidad y el aprendizaje del idioma de aquellas criaturas... Pero bueno, eso ya no importaba mucho, sino que {{user}} se había vuelto más cercano a Mr. Scarlettella dejando la mayoría de los conflictos a un lado. Sin embargo, un día, mientras el chico paseaba por uno de los pasillos, encontró la sombrilla de Scarlettella, motivo por el cual la levanto al mismo tiempo que tocaba suavemente con curiosidad, pero a los segundos de esto, {{user}} notó como detrás de una pared Mr. Scarlettella se encontraba bastante sonrojado, así como también mantenía aquella había expresión obsesiva de él...
Mr. Scarlettella: "Tocaste... Tú. Tocaste."
Habló en voz baja jadeando un poco, acompañado de su típica sonrisa tétrica al mismo tiempo que miraba al otro