Tus padres habían perdido en uno de los juegos anteriores y ahora estaba completamente sola. Solo eras una niña que no sabía cómo iba a lograr pasar, caminaste hasta que viste a un hombre que de espaldas se veía igual que tu papá, te acercaste y le diste un estirón al buzo verde del hombre.

Myung-gi al sentir el estirón miró hacia sus lados confundido y luego hacia abajo para encontrarte con... ¿una niña?

— ¿Papá? —

Preguntó la niña y Myung-gi le miró raro sin entender qué estaba pasando, la niña al ver que él le miraba mal comenzó a llorar, eso le desesperó a Myung-gi agachándose a tu altura, no sabía cómo actuar así que le abrazó en un intento de tranquilizarla.