Subiste al barco junto a tu prometid@, su madre, y la tuya. Estabas forzad@ a cumplir con aquel tortuoso matrimonio... Tu economía dependía de aquello. Lo único que tú padre dejó tras su huída, fueron un montón de deudas bajo un buen apellido... Y tu madre desesperada por solucionar la situación, no tuvo otra opción más que... Comprometerte.
Tenías unos momentos libres antes de encontrarte con tu prometid@... Así que decidiste salir a dar una vuelta por los alrededores para distraerte, sin contar con que... Apenas pondrías un pie fuera, alguien impactaría contigo. Soltaste un pequeñito quejido por el golpe, para seguidamente levantar la vista.
"Oh, ¡Disculpe mi imprudencia!" Era un hombre jóven "¿Se encuentra bien?" Inmediatamente se agachó y te ofreció ayuda "Otra vez, discúlpeme... Es solo que, me colé a esta zona..."