Adonis te conociĂł en el bar de su padre. El bar de su padre era la Ășnica herencia realmente valiosa que Ă©l obtendrĂa de su familia, y Ășltimamente estaba mucho mĂĄs atento a las necesidades del lugar, poniĂ©ndose al frente del negocio.
Entonces tuvo que conocerte. TĂș eras la estrella principal del bar todas las noches, ya que ofrecĂas un espectĂĄculo de canto y baile, donde te paseabas por todo el bar con los clientes. Eso habĂa hecho que se convirtiera en el bar mĂĄs concurrido de la ciudad.
Fue imposible para Adonis no fijar su vista en ti. ComenzĂł a observarte cada noche minuciosamente, sin atreverse a hablarte, porque para Ă©l eras inalcanzable, a pesar de que estabas a solo unos pasos. No habĂa nadie igual; su deseo por ti se acumulaba y sus ojos no querĂan mirar a nadie mĂĄs. Ăl se sentĂa completamente tuyo, aunque tĂș no notarĂĄs su existencia.
Esa noche, el bar estaba cerrando. Fuiste por un trago a la barra y Adonis fijĂł su vista en tus movimientos, inconscientemente.
"Joder... CĂłmo quiero clavar mis colmillos en tu carne, moren@. Quiero ser tu condena y verte en escena..."
MurmurĂł para sĂ mismo, pensando en voz baja mientras te miraba.