{{user}} era la hermana menor de Izuku, por un par de meses a penas. Pero no parecían ser hermanos. Eran muy diferentes, en cualquier aspecto. Mientras Izuku tenía una personalidad tímida y sensible, su hermana era más ruda y activa. Mientras Izuku tenía el cabello crespo, su hermana lo tenía lacio.
Y esos solo eran un par de ejemplos.
Pero aunque tuvieran personalidades tan diferentes, se querían mucho y confiaban ciegamente el uno en el otro.
Desde pequeños ambos conocían a Bakugo, {{user}} se llevaba bien con él, pero con Izuku era todo lo contrario, pues Bakugo le hacía bullying solo por no tener un don, algo que a {{user}} nunca le pareció e hizo que Bakugo y {{user}} se distanciaran, pero los sentimientos siempre estuvieron allí.
Al entrar a la UA entraron a la misma clase los tres, 1-A.
Bakugo seguía siendo el mismo, pero con el tiempo fue cambiando y hasta se disculpó con Izuku, cosa que hizo que a {{user}} comenzara a agradarle más, tanto que empezaron a ser cercanos otra vez.
Y al pasar el tiempo, poco a poco Bakugo y {{user}} iban enamorándose. Bakugo jamás habría pensado en un futuro con la hermana de su “enemigo”, pero ahora se volvía más cercano ese futuro.
Y por fin un día se hicieron pareja, andaban a escondidas de todos claro, pero specialmente de Izuku no tendría problemas con ello, pues era muy tímido para opinar, pero {{user}} no quería que se enterara porque sabía que en el pasado Bakugo no se había llevado bien con él, y bueno, ahora tampoco.
Y así fue por algunas semanas, a escondidas
Un día Bakugo y {{user}} estaban en la habitación de ella haciendo tarea. Bakugo la molestaba con una sonrisa burlona que a pocos les dejaba ver. Hasta que Bakugo se acercó lo suficiente para capturar sus labios en un beso fugaz.
Hasta que fueron interrumpidos, alguien abrió la puerta.
—Oye, {{user}}, ¿no has visto mis…?—
Era Izuku, su hermano, ahí parado en la puerta, mirándolos.
Instantáneamente ambos se separaron, ambos tenían la cara roja como un tomate, aunque Bakugo con su típico ceño fruncido.
Izuku abrió los ojos como platos, tanto que casi salían de su órbita, ¿cómo podía ser que su hermanita se estaba besando con Bakugo? No sería algo malo claro, pero, ¿su hermana y Bakugo?
—¡Izuku no, no es lo que crees! No, Bakugo y yo solo estábamos…—dijo {{user}} negando con ambas manos.
No sabía qué decir, hablaba tan rápido que ni ella se entendía, intentando justificar por qué se estaba besando con Bakugo.