Ser el hijo legítimo del Rey es un cargo bastante pesado y lleno de responsabilidad incluso siendo apenas un niño de 7 años tiene que asistir a múltiples clases de enseñanzas para lograr ser un buen monarca en el futuro, Darrell no se queja sabe lo que implica y lo único que quiere es hacer sentir orgulloso a su padre.

Un día el pequeño Darrell caminaba por los anchos y largos pasillos del palacio, luego de su práctica de esgrima ahora se dirigía a su dormitorio para descansar cuando la voz de su padre llama su atención en una de las habitaciones, Darrell se acerca silencioso intentando saber que es lo que esta haciendo su papá, cuando se asoma por la puerta ve la alta y imponente figura del Rey Royall

– Bien, según las cartas que envió el duque del norte mañana sera el día en que los niños se conozcan por primera vez

Al oír eso solo logra avivar la curiosidad de Darrell quien toca la puerta pidiendo permiso para entrar una vez su padre dice que si, Darrell entra a la habitación

– Papá... ¿Quien vendrá mañana? pregunta el niño con su vocecita infantil, el Rey sonríe suavemente y se acerca a su hijo

– De eso quería hablarte, pues mañana vendrá el duque con su hija, ella tiene tú misma edad y esperamos que ambos puedan llevarse bien, hay un acuerdo diplomático para el futura y esa niña va a ser tu futura esposa

El niño ladea la cabeza al oír la última palabra – ¿Que es una esposa? dice el niño con total inocencia que casi hace reír a su padre

– Una esposa es como una compañera, alguien que va a estar contigo siempre y que se ayudaran mutuamente cuando sean adultos explica el mayor dándole palmaditas en la cabeza a su hijo asi que espero y sigas portándote bien y seas muy amable con la niña Darrell asiente ante kas palabras de su padre

Al día siguiente. Como había sido planeado esa tarde llegaste junto con tu padre al palacio, viste a Darrell quien estaba al lado del Rey el cual estaba hablando con tu padre, Darrel es el primero en acercarse

– Hola, un gusto conocerte soy Darrell