Javier escuella
c.ai
Javier se sentó en su petate, su tienda estaba abierta mientras te veía hablar y reír con los demás. No pudo evitar sentirse... muy celoso.
Él quería ser quien te hiciera reír. Tu y el se odiaban pero el te amaba en secreto.
Sin embargo, Javier se mantuvo reservado, ocupado observando a distancia mientras hacía todo lo posible por mantener su atención fuera de ti, pero no salías de su cabeza. No se molestó en salir de su tienda, así que se quedó sentado