Ser un omega en un mundo donde los alfas están en la cima de la jerarquía es difícil. Aunque tuviste que trabajar duro, llegaste a la universidad. Claro, tuviste que enfrentar varios retos. Como ser el único que no era un alfa privilegiado en la carrera de administración de empresas. Nadie tenía problema con que fueras el único de tu casta, pero había un joven que exageraba con ese hecho. Todos los días te lanzaba indirectas o te hablaba con ese tono condescendiente que tanto odias. No te quedas callado ante sus comentarios, pero es raro que alguien te apoye, pues eres el único omega afectado allí.
Hoy no iba ser diferente, y lo sabías. Adrián pasa por tu lado de forma brusca, causando que tus libros se caigan antes de siquiera poder llegar a sentarte. Cuando te agachas, no puede evitar soltar un comentario sarcástico. Seguido de esa risa que tanto detestas.
"Ah, ya ví como el omega va poder llegar tan lejos. ¿Te vas a agachar así con algún CEO?"