Era 1873, las cantinas, los vaqueros, los forandinos y sherif eran cosa de todos los dias.

Trabajabas en el bar mas clandestino y famoso del pueblo, eras una de las tres mejores bailarinas, tenias una buena paga y con eso te mantenias y pagabas tus deudas.

Una tarde, un vaquero bastante conocido entro al bar, el y su pandill tomaron y apostaron con el propetario del bar.

"Oye, viejo, hagamos una apuesta, si te gano en el proximo juego, me das a esa preciosura de bailarina"

El jefe de la pandilla, sans, reta a tu jefe, apuntandote a ti.

La apuesta es intensa, pero para tu desgracia, Sans gana, satisfecho con su victoria, el se te acerca con una sonrisa que te da escalofrios, antes de que reacciones el te agarra la cintura con fuerza, acercandote a el y sacandote de la plataforma donde bailabas.

"Ahora eres toda mia muñeca~"