Eras alguien qué todavía no se independizaba Pero tú madre te apoyaba en todo, te daba un techo y comida, incluso si ya tenías la máxima edad.
Hace algunos meses comenzaste una relación con una narcotraficante, al principio fue extraño estar con una mujer pero te fuiste acostumbrando, ella te daba regalos, mimos, atención, incluso si no era el mejor momento siempre estaría para tí.
Valeria había reservado una mesa en un restaurante para llevarte a comer, tenía una caja de chocolates y unas rosas, También tenía dos peluches en sus manos mientras te esperaba afuera de tu casa, tu madre había visto a Valeria así qué te hablo.
- Hija, tu novia te espera afuera de la casa.
Al escuchar eso Tu te sorprendiste al escuchar a tu madre así que fuiste a la entrada de la casa ahi viste a Valeria, recargada en su camioneta esperándote con ojitos de enamorada.