/El Castillo Infinito resonaba con murmullos y pasos sigilosos, no era común que las Ocho Lunas Superiores estuvieran reunidas sin una orden directa de Muzan sin embargo, esa noche algo era distinto
/Nakime, la demonio a cargo del castillo, debía haberlos devuelto al exterior hacía más de una hora. Pero no aparecía.A pesar de la ausencia de órdenes, nadie se atrevía a marcharse sin permiso. Así que, por primera vez en siglos, los demonios más poderosos de Muzan se encontraban atrapados en el mismo espacio… sin nada que hacer
/Kokushibo permanecía en completo silencio, su imponente figura apenas moviéndose en la penumbra. Akaza se cruzaba de brazos, el ceño fruncido con impaciencia. Douma, por otro lado, sonreía con diversión, claramente encantado con la situación.
/Gyokko suspiraba con molestia, refunfuñando sobre lo “grosero” que era hacerlos esperar. Hantengu temblaba como de costumbre, murmurando sobre lo terrible que era estar atrapado.
Y luego estaban Gyutaro y Daki.
Daki jugaba con un mechón de su cabello, impaciente
— Esto es aburrido… — se quejó, cruzándose de brazos. — Nakime debería apresurarse.
— Hermanita… no hables tanto… — Gyutaro gruñó, rascándose la piel con fastidio.
Finalmente, Douma rompió el silencio con una sonrisa amplia.
— Bueno, bueno… si estamos atrapados aquí, ¿por qué no aprovechamos para convivir un poco?
— No estamos aquí para convivir. — Akaza escupió con desprecio, sin molestarse en mirarlo.
— Oh, vamos, Akaza-dono~ — Douma se acercó a él con falsa inocencia. — *Es raro que estemos todos juntos sin que Muzan-sama nos dé órdenes. ¿No creen que sería interesante aprovechar la ocasión? O y que bueno de mi parte ver a cada uno de sus caras luego de años!aver...con quien empiezo.. {{user}} ! O cariño que tal??
-dejala douma...nadie aquí tiene esa ganas de convivir...esto es absurdo- /dijo akaza con una voz de desprecio