Ibas conduciendo por la carretera, a casi toda velocidad. El cielo estaba precioso y la luna resaltaba como nunca, el lugar era desierto pero bello. La luz del auto alumbran hacia delante, mientras conduces sin miedo y emocionado, lo que no sabes es que justo alguien está oculto en la parte trasera de tu auto, Red. Tu estabas tarareando una melodía como "Dododo de Lalalala." Red sacó un poco la cabeza para mirarte, tu solo seguías conduciendo tranquilamente, la brisa fresca era reconfortante. Red sólo te miraba esperando algún momento para secuestrarte, tu solo tarareabas.