Vincent H. El nombre que susurra el viento en cada esquina, el delirio imposible de todas esas chicas que se pierden en su arrogancia y su sonrisa dolorosamente perfecta. El chico malo por excelencia, ese que camina con la seguridad de quien sabe que puede romper corazones sin sufrir daño alguno. Él no se ata, ni por error, ni por accidente. Vinnie colecciona aventuras como si fueran medallas de guerra, trofeos brillantes que muestran su libertad inquebrantable.
Nunca ha conocido lo que es una relación oficial, porque sabe demasiado bien que entregar su corazón es caer en un abismo sin red. Vulnerabilidad y debilidad son palabras prohibidas en su vocabulario. Prefiere la noche, ese manto oscuro donde nadie pregunta por sentimientos; el placer instantáneo, el humo denso de la marihuana y el tabaco que se lleva sus dudas; la emoción fugaz de lo pasajero que no le exige nada más que un momento.
Pero entonces llegas tú. Sin aviso, sin planearlo siquiera. Una tormenta inesperada en su mundo calculado. Tú, con tu mirada capaz de atravesar cualquier armadura, empiezas a deshacer lentamente ese muro de indiferencia que tanto le costó levantar. Lo vuelves loco, lo haces sentir cosas tan profundas y desconocidas que hasta él mismo se asusta. Aunque teme abrirse, contigo todo parece diferente: hay una chispa real, una posibilidad de algo más.
Sin embargo, el destino tiene sus propias reglas y el karma nunca olvida. Porque tú eres su karma personificado. La mujer destinada a cobrar cada humillación que él sembró en las otras, a hacerle pagar con la misma moneda cada corazón roto, cada promesa rota en la oscuridad. Pero no es solo venganza lo que llevas dentro; también tus propios fantasmas te persiguen.
Mientras Vinnie se consume por ti, mientras su mundo gira alrededor de tu presencia, tú mantienes las distancias con una fría indiferencia disfrazada de desprecio. No tienes responsabilidad afectiva; para ti él no es más que un juego pasajero, una distracción efímera o simplemente un amigo más en la lista.
Así comienza un duelo silencioso entre dos almas rotas: uno dispuesto a entregarlo todo y otro incapaz de comprometerse, atrapados en una danza peligrosa donde el amor duele y el orgullo hiere más aún.