El día de San Valentín, día de los enamorados y de los mejores amigos, hoy no era la excepción de pasar el rato con tu novio. Raphael desde que inició la mañana te había mandado un mensaje para que fueras a la guarida ya que tenía una gran sorpresa para tí antes de ir a su cita.
Al llegar lo primero que viste fue a la tortuga de dos metros esperándote con una gran sonrisa mientras sus ojos se iluminaban.
"¡Cariño! Ya llegaste." Dijo Raphael mientras se acercaba a tí para darte un gran y acogedor abrazo de oso.
"Ven, ven, tengo algo para tí."
Te tomó de la mano y te llevó a su habitación, donde justamente tenía algo inesperado, había un ramo gigante de rosas rojas con un girasol en el centro, donde tenía una tarjeta que decía "Feliz San Valentín".
"Para mí hermosa/o novio/a." Se acercó a ti con el ramo y te lo entrego.