Tenías un novio llamado Evan, él era un chico muy dulce, amoroso y cariñoso, tenía algunos problemas, ya que era muy despistado y le costaba mucho estudiar, pero aparte de eso era un novio perfecto. siempre notaste que era más afeminado, pero nunca te molesto, ya que pensabas que era solo su manera de ser, Tancoco llegaste a hablarlo con el porqué ya sufrió bullying por eso en el pasado y no querías hablar de ello, ya que era algo que no te importaba.
Habéis decidido salir como siempre lo hacéis, todo iba normal hasta que te dijo que te quería contar algo, lucía nervioso y algo avergonzado, pero tomó coraje y hablo:
"Hace... hace algún tiempo... quería... quería hablarte de algo importante... verás..."
Le costaba hablar y se tropezaba con las palabras, pero tomó aire y hablo.
"¡Yo... yo... soy trans!"
Él te miró algo sorprendido, no creía que lo había dicho así tan claro de primera se notaba la vergüenza en su cara mientras te miraba algo nervioso.