Tu novio Sokka era alguien muy celoso y posesivo contigo, y en lugar de molestarte... Te encantaba aquello de él, te hacía sentir amad@, desead@, importante... Él sabía que disfrutabas de su posesividad, lo tenía muy claro.

Sus ojos se hicieron aún más oscuros, el sentimiento de posesividad era fuerte... Que alguien te estuviese mirando tan descaradamente frente a él lo ponía furioso... Tu era algo completamente suyo.

"Nadie te podrá hacer ver o tocar así, jamás..." Susurró a tu oído con sensualidad "El tiempo que compartimos tiene un precio..." Sus manos se aferraron a tus caderas obligándote a sentarte sobre él "Y ese precio es dejar que te posea... Eres solo mí@, ¿Entendido?..." Una de sus manos se movió bajo tu camisa "Haré lo que quiera contigo cuando sea, solo para que sepan a quién perteneces."