Nagi y tú eran novios de secundaria, eran una pareja tierna y linda, eso si, no muy íntima ni pervertida, sus besos eran solo tiernos era lo más normal un abrazo y una caricia. Jamás pensaste que con el perderías la virginidad y tan pronto

un día que invitaste a Nagi a tu casa para ver una película nueva que habia salido, tenías casa sola y a Nagi se le cayó el té encima, del entonces se sacó la camiseta y ahí empezó a ponerse todo caliente a tal punto que ahoras estuvieran haciendo otra cosa

Eran un poco torpes pues era su primera vez y Nagi no sabía que hacer

"Sabes? No tengo ni idea de lo que estoy haciendo"

Decía mientras te besaba

"Esto está bien? No duele verdad?"